Michael Jordan: El sufrimiento dio impulso a su grandeza
Todo comenzó el 17 de febrero del año 1963, fecha en la que los padres de un pequeño niño contemplaron el nacimiento de una de las estrellas más influyentes y uno de los atletas que el mundo reconocería como ícono y referencia al baloncesto.
Michael Jeffrey Jordan se dio a conocer no solopor la fanaticada deportiva, sino también, por quiénes han pasado por momentos difíciles, dolor y caos en cada aspecto de su vida. Remontándonos al día en que nació, sufrió su primer incidente: hemorragia nasal.
Ese momento, esos segundos de angustia en los que su madre, su padre y los doctores, después de varias horas de trabajo de parto, lograron ver al pequeño Michael salir, fue uno de los días más felices de la familia luego de pasar por una pérdida luego de que la abuela de la conocida leyenda del baloncesto falleciera.
De inmediato, luego de su hemorragia, todos sabrían que traería vida a todos en el hogar, al igual que demostraría ser un guerrero, dispuesto a luchar ante cualquier adversidad que se le presentara.
A los dos años de edad, otro infortunio tocó a su puerta, el cual hizo analizar su verdadero propósito en la vida: fue un milagro el que haya salido bien después de haber recibido una descarga eléctrica al tocar unos cables accidentalmente mientras su padre arreglaba su auto. Su cuerpo cayó varios metros atrás luego de la descarga, sin embargo, logró salir bien después de tan embarazoso y duro momento con tan pocos años de vida. Lo que reafirmó la teoría de ser un guerrero.
Como si eso fuera poco, ‘’Su majestad’’, desarrolló un miedo terrible al mar. Este temor, es justificado porque presenció la muerte de su mejor amigo y de su novia, un momento que lo dejó en una situación repleta de tristeza. Dos de las personas más importantes en su vida, se marcharon de la manera más trágica.
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