Exportación en alza en las Grandes Ligas
Martín Prado fue noticia el viernes, al regresar a la acción con los Marlins, luego de siete meses fuera de juego y más de un año luchando con las lesiones.
El capitán de los peces alineó en la tercera base y falló cuatro veces con el madero. Y poco importa que se haya ido en blanco. Para él, fue el final aparente de un largo proceso que empezó en el Clásico Mundial de Beisbol, cuando se lastimó una corva, y que siguió durante una campaña en la que apenas pudo disputar 37 juegos por causa de las dolencias físicas.
Prado también fue noticia esa noche, aunque menos divulgada. Al aparecer en el lineup de Miami, se convirtió en el octogésimo séptimo venezolano que ha jugado este año en las Grandes Ligas, una cifra que únicamente es superada por el total de estadounidenses, al revisar entre todas las nacionalidades que hacen vida en la MLB.
Ha sido un torneo curioso. Aunque los peloteros nacidos en la República Dominicana eran más que los criollos el día inaugural, en las últimas semanas los nativos han tomado la delantera en la cuenta sobre los quisqueyanos.
Venezuela llegó antes que Quisqueya a las Mayores. El Patón Carrasquel rompió el celofán para la embajada vinotinto en 1939, con casi dos décadas de anticipación respeto a Ozzie Virgil, el primero entre sus compatriotas en llegar a la gran carpa.
Las cuentas se equilibraron y posteriormente pasaron a ser ampliamente dominadas por los oriundos de la antigua isla La Española, al radicarse allá las academias de las 30 organizaciones en un proceso de literal industrialización beisbolera que comenzó en la década de los años 80.
Un total de 714 jugadores nacidos en Dominicana han visto acción en las Grandes Ligas contra 382 que vieron la luz en nuestra tierra, una recopilación que no incluye a aquellos que, teniendo el pasaporte, nacieron en terceros países, como Alex Rodríguez (Estados Unidos) o Aurelio Monteagudo (Cuba).
Ese dominio no ha sido tal en este primer mes de torneo, un plazo que se cumple precisamente este fin de semana.
Los 87 venezolanos en estos 30 días iniciales son más que los 84 quisqueyanos, con todo y el ascenso de Rossell Herrera, que hizo su estreno como bateador emergente de los Rojos, el mismo viernes en que Prado salió de la lista de incapacitados.
La expedición nacional tuvo 110 representantes en la MLB en 2017. Fue un récord para Venezuela. Pero la marca se quedó corta ante los 152 oriundos de la República Dominicana que disputaron el mismo torneo.
En 2018 la historia ha cambiado. Al menos fue así en el primer mes.