Federación de ONG lamenta ambiente en el que crecen los niños en Nicaragua
La Federación Coordinadora Nicaragüense de las ONG que Trabajan con la Niñez y la Adolescencia (Codeni) lamentó este sábado, Día del Niño en Nicaragua, el ambiente en el que crecen los menores en el país centroamericano, que vive su peor crisis sociopolítica en décadas. "Lamentamos que por el ambiente de violencia, represión y persecución a la ciudadanía, como asesinatos, prisión y exilio forzado, a la niñez y a la adolescencia no se les garanticen su integridad física, psicológica, vivir en familia y seguros", indicó la organización en una declaración pública.
Nicaragua está hundida en una crisis desde abril de 2018, cuando una aparente mayoría se levantó en la llamada "insurrección cívica" contra el presidente Daniel Ortega, cuyas fuerzas combinadas han sido responsabilizadas por cientos de muertos, presos y desaparecidos, miles de heridos y decenas de miles de exiliados.
Entre las víctimas mortales, Codeni informó que al menos 29 niños perdieron la vida en ataques con armas de guerra ejecutados por el gobierno de Nicaragua contra opositores del presidente Ortega, en los últimos 13 meses. Además identificó a 19 pequeños bajo diferentes regímenes carcelarios como "presos políticos". También aludió a una cantidad no específica de menores que sufrió desplazamiento forzado junto con sus padres que vive hoy "en situaciones precarias e inhumanas dentro y fuera del país".
A las muertes se suman los huérfanos, exiliados, los que sufren secuelas psicológicas y los que ya no pueden asistir a la escuela o al sistema de salud, por ser hijos de opositores, muchos de ellos "presos políticos", recordó la defensora Yonarqui Martínez, defensora de varios menores de edad acusados por el gobierno de terrorismo y otros delitos.
Para Martínez, es un "dolor inmenso" conocer que incluso niños "fueron torturados igual que los adultos; con los menores se ensañaron más", enfatiza. Los pequeños torturados por protestar contra Ortega fueron quemados con ácido o con colillas de cigarro, recibieron golpes, y les hicieron heridas, recordó la abogada siguiendo los testimonios de las víctimas.
Uno de los casos más terribles fue el de un adolescente de 14 años de edad, que en septiembre pasado denunció haber sido secuestrado por agentes de la Policía Nacional, que utilizaron una jeringa para marcar en uno de sus brazos las iniciales "FSLN", del oficialista Frente Sandinista de Liberación Nacional.
La crisis de Nicaragua ha dejado 325 muertos desde abril de 2018, de acuerdo con la información de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, aunque organismos locales informan que son 594, y el gobierno reconoce 199.
