Jefe del Comando Central de Estados Unidos se reunió con kurdos en Siria
El jefe del Comando Central de EEUU, el general Kenneth McKenzie, y el enviado especial adjunto de EEUU para la coalición internacional contra el Estado Islámico, William Roebuck, se reunieron este lunes con líderes militares kurdos para tratar la situación tras la derrota territorial del grupo terrorista.
McKenize y Roebuck se entrevistaron con el general Mazlum Abdi, comandante en jefe de las Fuerzas de Siria Democrática, una coalición de milicias liderada por kurdos, con quien conversaron además sobre la zona de seguridad en el norte del país con Turquía, informó en Twitter el portavoz de las FSD, Mustafa Bali.
En las conversaciones se tocaron importantes incluyendo la zona de seguridad propuesta, el futuro de la cooperación entre las FSD y la coalición contra el EI y la situación de los yihadistas y su familias, indicó Bali.
La representación kurda reiteró que los asuntos mencionados, incluyendo la situación de seguridad en el noreste de Siria, solo pueden ser resueltas mediante el diálogo entre las partes.
El encuentro tuvo lugar en la misma jornada en la que el ministro de Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu, declaró que si Estados Unidos y Turquía no llegan a un acuerdo para crear una zona segura a lo largo de la frontera turco-siria, Ankara lanzará una operación militar en el norte de Siria.
El ministro aludió a la expulsión de las milicias kurdosirias Unidades de Protección del Pueblo (YPG), el principal cuerpo de las FSD y aliadas de Washington en la lucha contra el EI, pero consideradas terroristas por Ankara.
Las FSD lideraron en los últimos años el combate contra el EI en Siria, donde fueron arrebatando a los terroristas el territorio del denominado "califato" ciudad a ciudad hasta que en abril pasado consiguieron conquistar el último enclave que quedaba bajo su control.
Pese a la derrota territorial del EI todavía hay miles de miembros del grupo terrorista diseminados por toda la zona oriental de Siria y el noroeste de Irak, donde el Ejército iraquí ha restablecido las operaciones militares para evitar un resurgimiento de los radicales.